El aburrimiento, todos sabemos lo que es y todos lo vivimos, en los últimos años en los países desarrollados ha aumentado sustancialmente, podríamos decir que incluso se ha multiplicado. Se crea una contraposición, esto quiere decir que por una parte tenemos las obligaciones y el trabajo, que la mayoría de gente, entre la que nos incluimos lo vive como una esclavitud y por la otra parte, mucha más atractiva para todos, el tiempo libre. Los tiempos de ocio al contrario que las obligaciones son considerados como la verdadera vida, donde se espera alcanzar nuestra realización personal.
Tener tiempo libre no es malo, yo diría que es todo lo contrario pero demasiado tiempo libre puede ser fatídico, podemos tomar incluso una depresión. Nosotros estamos criticando las obligaciones y el trabajo pero algunas personas en paro pensaran bendito trabajo y benditas obligaciones porque les encantaría trabajar.
La industria pretende "aprovecharse" de nuestro aburrimiento con ofertas muy suculentas como el turismo, el juego, los espectáculos... Utilizaremos el dato de que las medias de consumo de televisión oscilan entre las 3 y las 5 horas diarias en los países industrializados. Así el tiempo libre se ha convertido en una gran victoria pero al mismo tiempo en un problema ya que el aburrimiento es síntoma del vacío existencial.
Claro ejemplo entre el aburrimiento y su antónimo.
¿Y vosotros como combatís vuestro aburrimiento? más de uno lo estará combatiendo leyendo esta entrada.
Buen finde...
Claro ejemplo entre el aburrimiento y su antónimo.
¿Y vosotros como combatís vuestro aburrimiento? más de uno lo estará combatiendo leyendo esta entrada.
Buen finde...
Tener demasiado tiempo libre (yo creo que nunca es demasiado) sólo es malo si eres la clase de persona que no sabe qué hacer con él, sin inquietudes, intereses... En realidad, el tiempo libre no tiene por qué serlo, si entendemos "libre" como "vacío". El tiempo libre ha de ser, más bien, tiempo para hacer lo que uno quiera, lo que de verdad te interese y apetezca. Pero claro, hay personas a las que no les interesa ni apetece nada. Esas son las que sufren con el tiempo libre. Creo que yo no he experimentado sensación de aburrimiento desde que era un niño (es decir, desde que empecé a saber qué me interesaba y apetecía). No tengo tiempo de aburrirme; al contrario: lo que me falta es tiempo, y no sólo por mis obligaciones, sino también, y sobre todo, por todas las cosas que quiero hacer (y muchas de las cuales no tendré tiempo de hacer en lo que me queda de vida, con lo cual ya tengo garantizado que no voy a tener oportunidad de aburrirme jamás).
ResponderEliminarSi Agustín, pero mira imagínate tener las 24 horas del día disponibles, en tu tiempo libre puedes hacer mil cosas, practicar deporte, reunirte con la familia, salir con los amigos, leer... Pero al final te cansas de todo eso también.
ResponderEliminarY yo lo que quiero decir es que a veces nos confundimos, porque mucho tiempo libre en exceso no es bueno. Y yo creo que todos hemos experimentado el aburrimiento alguna vez.
Un saludo
Desde luego, es una cuestión totalmente personal, y no podemos hablar en un sentido absoluto. Pero yo insisto en que para mí el tiempo libre nunca lo es en exceso, por la sencilla razón de que lo que tengo en exceso son cosas que quiero hacer. Ya dije en mi comentario anterior que creo que no hay que confundir tiempo libre con tiempo en blanco, el cual evidentemente sí genera aburrimiento. Tal como yo lo entiendo, el tiempo libre es tiempo para hacer lo que uno realmente quiere (LIBRE), no lo que le impongan sus obligaciones prácticas (por ejemplo, ganarse el sueldo). Entonces la cuestión clave es si se es o no el tipo de persona que tiene cosas que quiera hacer. El problema real no sería el de cómo reducir un supuesto exceso de tiempo libre, sino el de aprender a ser la clase de persona que tiene suficientes intereses e inquietudes como para ser capaz de llenar su tiempo por sí mismo, sin necesitar que sean otros (o las circunstancias) quienes lo hagan por ti.
ResponderEliminarSi, la mayoria de gente tiene muchas cosas que les gustaría hacer, pero me refiero, tal vez una tarde en la que una persona esté en su casa, bien porque sus amigos ese día no salgan, no esté con su familia, que se puede dar el caso, yo creo que a lo largo de esa tarde esa persona experimentaria el aburrimiento de forma notoria.
ResponderEliminarPero como bien dices es una cuestión personal.
Un saludo
A veces, el aburrimiento va ligado a la falta de imaginación.
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